Ciudad de México, agosto de 2025. – La Ciudad de México se prepara para recibir una de las exposiciones más importantes del año: la Bienal Arte/Sano ÷ Artistas 8.0, un evento que se ha consolidado como un punto de encuentro imprescindible entre lo tradicional y lo contemporáneo, entre la raíz artesanal y la innovación creativa. En este escenario de intercambio cultural y artístico, Baja California se hace presente con una propuesta cargada de simbolismo, fuerza y sensibilidad: el “Corazón Migrante”, obra colaborativa del muralista Enrique Chiu y el ceramista Fabián Grijalva.
Un espacio donde dialogan las tradiciones
El Museo de Arte Popular (MAP), situado en el corazón del Centro Histórico de la capital, será la sede de esta octava edición, que reunirá a 108 creadores de distintos estados del país. El propósito es claro: abrir un espacio donde artesanos, artistas visuales y diseñadores industriales puedan dialogar, experimentar y demostrar que el arte, en cualquiera de sus formas, es un lenguaje vivo capaz de renovarse sin perder su esencia.
Desde hace años, la Bienal Arte/Sano ÷ Artistas se ha distinguido por ofrecer piezas que sorprenden al público, no solo por su técnica y ejecución, sino también por su capacidad de narrar historias que conectan con lo más profundo de la identidad mexicana. Y es precisamente ahí donde la representación de Baja California adquiere un valor especial.
El “Corazón Migrante”: arte con causa y raíz fronteriza
La pieza presentada por Chiu y Grijalva lleva un nombre poderoso: “Corazón Migrante”. Elaborada en barro, pintura y metal, esta escultura de gran formato —cerca de 80 centímetros de altura, 50 de ancho y un peso aproximado de 50 kilos— no es simplemente un objeto artístico. Es un símbolo.
El corazón, con texturas y formas que evocan el movimiento y la fuerza, refleja la resistencia y esperanza de los migrantes, aquellos que cruzan fronteras con sueños, anhelos y una identidad que no desaparece, sino que se transforma. El barro aporta la raíz, lo ancestral y lo terrenal; la pintura le da vida, color y emoción; y el metal representa la fortaleza, la dureza de los caminos recorridos y la resiliencia que caracteriza a quienes migran.
La colaboración entre ambos artistas es, además, un testimonio de la unión entre disciplinas. Chiu, ampliamente reconocido por sus murales de impacto social en la frontera norte, aporta la visión de lo colectivo y lo comunitario; mientras que Grijalva, maestro del barro, suma la destreza técnica y la conexión con los oficios artesanales que dan sustento a nuestra identidad cultural.
Baja California en la escena nacional
Para Baja California, tener representación en un evento de esta magnitud es más que un logro artístico: es un recordatorio de la riqueza cultural que existe en la frontera. Una región marcada por la migración, la diversidad y la convergencia de culturas, que hoy se proyecta en el escenario nacional con una obra que encapsula precisamente esa esencia híbrida, compleja y profundamente humana.
El “Corazón Migrante” no es solo una pieza de exposición; es un mensaje. Una invitación a reflexionar sobre la movilidad, los sueños y las luchas que atraviesan miles de familias en la frontera norte de México. Con esta obra, Chiu y Grijalva no solo representan a Baja California, sino que elevan la conversación hacia la solidaridad, la paz y la empatía, recordándonos que el arte tiene la capacidad de tender puentes donde las fronteras dividen.
Una cita imperdible
La inauguración oficial de la Bienal Arte/Sano ÷ Artistas 8.0 está programada para noviembre de 2025 en el Museo de Arte Popular (MAP), ubicado en Revillagigedo 11, en pleno Centro Histórico de la CDMX. La exposición permanecerá abierta al público durante varios meses, permitiendo que visitantes nacionales e internacionales se acerquen a una experiencia única donde el arte popular y el contemporáneo se encuentran cara a cara.
En medio de más de un centenar de propuestas, el “Corazón Migrante” se erige como una obra que trasciende lo estético para convertirse en un relato colectivo: el de las fronteras, los viajes, la memoria y la fuerza de un pueblo que no se rinde.
Con esta participación, Baja California confirma que su voz artística tiene un lugar importante en el escenario nacional. Y lo hace de la mano de dos creadores que, desde sus disciplinas, nos recuerdan que el arte es mucho más que expresión: es resistencia, es identidad y, sobre todo, es puente de humanidad.